VIAJE A RABAT

 Del 25 al 28 de Febrero, estuvimos en Rabat, para continuar el contacto con las comunidades de subsaharianos allí.
Desde hace ya  5 años la presencia de Elín en esta ciudad ha ido evolucionando en un trabajo codo con codo con l@s inmigrantes y refugiad@s en Marruecos.
En esta ocasión al viaje fueron Teresa, Armel y Jesús. Los encuentros con diferentes grupos: voluntarios, líderes de comunidades, responsables de asociaciones, fueron muy numerosos.
Reunión con líderes de comunidades en Rabat. Aquí con la comunidad
de Camerún. De izquierda a derecha: Armande, Armel, Jesús, Pierre, Serge y Daría
Los objetivos principales han sido: Animar y acompañar el trabajo de l@s voluntari@s de Elín allí; organizar las actividades y encuentros en verano junto con Cáritas- Rabat y líderes de diferentes comunidades, pagar las becas del colegio de varios niños subsaharianos y visitar a sus familias.
En este viaje se dio además una circunstancia muy especial: Armel, camerunés, miembro de la Asociación, volvía por primera vez a Ceuta y Rabat, después de haber hecho el camino entre 2005 y 2007 para llegar a España. Hubo encuentros muy emotivos con los amigos que aún están en Marruecos, en la casa de Ceuta, en el CETI… Revivir esa historia y poder ofrecer toda su experiencia para ayudar a otros y abrir nuevos caminos de lucha por la justicia y por la dignidad de tantos/as, nos ha marcado en esta visita. Ser testigos de este milagro, nos anima a continuar.
No podemos cerrar esta breve crónica sin mencionar otros dos encuentros también excepcionales.
Por un lado el ir a la casa de Armande, voluntaria de Elín, que vive en Rabat con sus 5 niños a los que desde España se les está ayudando para estudiar. Salió de su país con ellos y sigue luchando por sacarlos adelante. Un ejemplo extraordinario de valentía, amor y fuerza, que nos dejó sobrecogidos y que nos muestra que es eso, la capacidad de amar, la que supera toda frontera. 
Armel y Serges con dos de los hijos de Armande en su casa. 
Por último, el encuentro con la comunidad camerunesa en un barrio de Rabat el último día. Chicos entre 18 y 25 años, que viven hacinados en varias casas, a la espera de poder llegar a España y alcanzar su sueño.
 No sé ni cuántos habría en aquella habitación donde nos esperaban, gracias a los amigos que conocía Armel. Les animamos, les informamos de la situación en Ceuta y la frontera, y de quiénes éramos Elín y qué hacíamos allí. 
Fue un primer contacto, que ojalá pueda repetirse. Pero desde la experiencia de fe que muchos vivimos y que sobre todo ellos tienen, nos sobrepasó la oración compartida que tuvimos. Alguien dijo: “Por favor, vamos a hacer una oración juntos”. “qué vuestra visita bendiga esta casa”
Había mucho ruido por la cantidad de gente, pero, poco a poco se hizo silencio; todos cogimos nuestras manos y pedimos a Dios la fuerza y el Espíritu para resistir, para pasar la frontera. Oramos por el gobierno de Europa, por los compañeros que están enfermos y por el último hermano que murió ahogado en Ceuta; para que su muerte sirva, y de ella surja vida. Oramos por sus familias y por ellos, para que sientan que Dios camina a su lado y que Dios les ha enviado a liberar a su pueblo, a su herman@s, a sí mismos; y que nuestro encuentro significa el encuentro del Norte y el Sur, y la caída de las fronteras que nos separan, nacidas del egoísmo. Y junto al dolor, el sudor y el sufrimiento, de nuestras manos apretadas, salió fuerza, mucha fuerza… capaz de transformarlo todo. 
Volveremos otra vez allí en mayo, y os seguiremos contando. 

«CLUB DEPORTIVO ELÍN»

Una de las actividades que va tomando fuerza dentro de Asociación Elín es el deporte. Desde octubre del año pasado lleva en marcha el que hemos llamado “Club deportivo Elín”. Sus objetivos son mejorar las condición física de los chicos, favorecer las relaciones de amistad y cooperación entre el grupo y posibilitar la integración en la ciudad.


El día 21 de enero, sábado, tuvimos la segunda “fiesta del deporte”, para animar a la participación en el Club.

Los días previos vinimos organizando la fiesta con ayuda de nuestros 3 voluntarios: Ibrahim, Da Silva y Laye, la última incorporación (el cocinero de la acampada, para l@s que estuvisteis en Navidad).

Comenzamos a las 10:00 de la mañana, en el campo de fútbol enfrente de la casa. 
Primero tuvimos canciones y juegospara acoger a los que iban llegando: la guitarra de Cande, el baile del pollo, el bugui-bugui … y otros juegos africanos nos hicieron reír y disfrutar mucho. Nos acordamos de la gente voluntaria que vino en Navidad y de Paula, porque la mayoría los aprendieron con vosotr@s. 
Os dejamos una muestra en este vídeo: 

Continuamos con los distintos deportes. Primero balonmano y voleibol.
 Luego un juego de equilibrio más una pequeña demostración de parte del “sensei”,  para animar a la participación en la sección de karate. 
Finalmente, concluimos con  2 partidos de fútbol, que entre ellos sigue siendo el deporte rey.

La convocatoria fue un éxito y no podía faltar la foto de familia
Pero la jornada no acabó ahí, nuestros inigualables cocineros, Laye y Loumkua, prepararon un arroz con pollo para chuparse los dedos, que degustamos en la casa.

Loumkua y Laye en la cocina de casa
Y si hablamos de “fiesta”, en Elín siempre terminamos bailando con distintos ritmos, abiertos a la participación de tod@s y pidiendo como siempre: “oubriez les frontiers”.

FIESTA FIN DE AÑO

A eso de las 11 :00 comenzaron a llegar los chicos a la Asociación. Nos juntamos más de 50. Tuvimos de todo. Primero proyección de los momentos estelares de los días anteriores, lo que levantó risas y carcajadas de todo lo vivido. Luego hubo un tiempo de silencio y oración para pedir por el nuevo año, que fue muy emotivo; algunos tomaron la palabra para dar las gracias y para no olvidar a los que quedaron atrás en el camino. A a continuación las uvas, como marca la tradición, comida, sidra…
Después fue la fiesta: juegos, bailes…. Hasta altas horas de la madrugada.
Finalmente nos despedimos, con la sensación de haber vivido mucho juntos, de que conocíamos a los chicos por sus nombres y sus historias eran más nuestras. Nuestra familia en esta Navidad, se ha hecho muy grande.
Gracias a tod@s los que lo habéis hecho posible y esperamos que haya empuje para rato en el nuevo año.
Os dejamos con un enlace de lo que fue la canción himno de este encuentro, y recordando con que intensidad lo bailamos aquella noche junto con ellos se  me ponen los pelos de punta.